UN INFIERNO A TU IMAGEN Y SEMEJANZA. 
(Oda al sindicalismo utilizado por algunos sociópatas 
para masturbarse viendo fotografías de obreros de la industria 
sodomizados antes de su ejecución) 
En lo alto de la Montaña Sagrada 
los hombres luchaban, 
alguien apuntó aquello de "mera cuestión de orgullo"; 
luego, las nubes 
-que siempre habían sido negras- 
se los tragaron 
y, años más tarde, vomitaron sus almas rotas sobre desiertos 
construyendo miles de infiernos, 
cada uno a imagen y semejanza de su morador. 
Al final, murieron sepultados por el silencio. 
PAUSA PARA LA CATARSIS. 
Pasó el tiempo y renació la rabia, la venganza y el desprecio, 
tal era la tríada que caracterizaría a los Necios, 
luego, lo profetizado: los monstruos con máscaras humanas 
fusilaron a sus hermanos más indefensos, 
y bebieron su sangre en orgías de odio 
santificando así su ira... 
...¡era cierto que al muerto se le podía humillar! 
Ahora, -aunque sea tarde-, soy conocedor de la verdad: 
¡La Tierra no será jamás heredada por los débiles de espíritu!, 
y, horrorizado, contemplo el estandarte 
del nuevo Rey de la Carcoma: 
UN LEÓN NEGRO DEVORANDO CORDEROS CIEGOS, 
y su lema que reza: ¡Muerte a los Gusanos Sensibles! 
PAUSA PARA EL SUICIDIO DE LA RAZÓN. 
Y mis últimos gritos se apagan 
como una colilla fumada con excesiva prisa: 
¡SALVE, REY DE LA CALUMNIA! 
¡SALVE, REY DE LOS GUSANOS! 
¡SALVE, HIJO DE LA GRAN PUTA! 
Fundido en negro sobre mi cadáver pudriéndose 
dentro de un ataúd-fábrica. 
BORRASKA.
Ciberfanzine de literatura subterránea. Número 2
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